Se recolecta con tijera de podar, cuchillo o serrucho. De ahí en adelante, la única herramienta utilizada es el cuchillo o cortaplumas, además de las manos. Se parte en verde y después es importante dejar secar las varas unos cinco días. Luego se limpian y emparejan, dejándolas del grosor necesitado, según el canasto requerido. Una vez que las varas están secas y limpias, se puede comenzar el tejido partiendo por la base, cruzando las varas, y agregando una vara más corta para que queden impares. Luego se empieza a tejer, levantando el tejido hasta formar el canasto. |